Métodos de prevención eficaces para el herpes

Métodos de prevención del herpes, precauciones y consejos

La información para prevenir el herpes es muy valiosa ya que simples consejos pueden evitar la infección y sus molestos síntomas. Incluso con todos los hechos conocidos, ningún ser humano es capaz de prevenir los virus y el del herpes no iba a ser una excepción, sin embargo, si continúa leyendo podrá esquivar algún que otro brote de herpes. Las circunstancias que intervienen en la transmisión no son en blanco o en  negro, e incluso con las mejores técnicas pueden ocurrir cosas que no podamos predecir. 

¿Cómo prevenir la infección por herpes?

Muchas parejas que han tenido relaciones sexuales y padecen de herpes han pasado años sin transmitirse ni un solo brote. Algunos simplemente evitan tener contacto sexual cuando los signos o síntomas están presentes, mientras que otros utilizan condones u otra protección entre los brotes para ayudar a proteger contra la transmisión asintomática.

Si usted toma las precauciones necesarias, las probabilidades de contraer el virus de su pareja son pequeñas. Tener herpes genital no necesariamente significa que usted va a necesitar la completa abstinencia de relaciones sexuales o un menor disfrute del sexo. El riesgo de transmisión del virus, posiblemente, puede ser reducido si utiliza condones. El uso continuado de preservativos en una relación a largo plazo es una decisión personal que sólo la pareja puede hacer. La mayoría de las parejas encuentran que como la importancia de la infección por HSV en su relación se ve en perspectiva, que el uso del condón puede llegar a ser menos relevante si esta es la única razón por la que se utilizan los condones. Sin embargo,la pareja debe intentar evitar a toda costa las relaciones sexuales durante un episodio activo de herpes, porque es cuando es más probable que se transmita el virus. Este período incluye el tiempo desde que su pareja ha mostrado signos de advertencia de un brote, como una sensación de hormigueo o ardor en los genitales, hasta que la última de las llagas haya sanado. Además, la actividad sexual prolonga la sanación del episodio. El riesgo de transmisión es mayor si hay grietas en la piel, por ejemplo, si tiene abrasiones aftas, a menudo debido a la falta de lubricación.

Puede ser útil usar un lubricante específicamente para las relaciones sexuales y evitar relaciones sexuales si tiene aftas. La Lubricación sexual al inicio de la actividad sexual.

Las Llagas en otras áreas, como las nalgas y los muslos, pueden ser tan contagiosas como los de la zona genital, y se debe tener cuidado para evitar el contacto directo con tales llagas durante el sexo. En otras ocasiones, aún existe un pequeño riesgo de transmitir la infección, aun cuando no hay signos de herpes genital. Si usted o su pareja tiene herpes labial, es recomendable evitar el sexo oral, ya que esto puede transmitir el virus a los genitales.




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